Grace Springer fue quien captó con su celular en el concierto de Coldplay a Andy Byron, CEO de Astronomer, y a su directora de RR. HH., Kristin Cabot, en las pantallas del estadio durante la escandalosa kiss cam. Sin embargo, en diálogo con The Sun, la joven de 28 años de edad y oriunda de Nueva Jersey, aseguró que no conocía a la pareja y que nunca se imaginó que sus imágenes subidas a redes sociales tomarían tal grado de notoriedad.
“No tenía idea de quién era la pareja. Simplemente, pensé que capté una reacción interesante a la kiss cam y decidí publicarla. Una parte de mí se siente mal por poner patas arriba la vida de estas personas. Espero que sus parejas puedan sanar de esto y tener una segunda oportunidad de ser felices, como merecen, con el futuro aún por delante. Espero que para ellos mi video haya sido una bendición disfrazada”, manifestó la joven, aún sorprendida por todo lo sucedido.
Grace había viajado desde Boston con un grupo de amigos para ver a su banda favorita y la emoción de todo lo vivido hizo que publicara el video de la pareja en una situación comprometedora sin darle mucha importancia. “Cuando lo publiqué al video esa noche tarde, antes de acostarme, estaba ganando terreno con un par de miles de visitas. Me desperté con siete millones. Luego más de treinta millones. Fue abrumador, como mínimo”, reconoció la mujer, quien hasta entonces llevaba una vida anónima.
Para tratar de llevar un poco de humor a la situación, Grace Springer subió este viernes un nuevo video a su cuenta de TikTok, pero en el que se la puede ver a ella de perfil completo con la frase: “Regreso a TikTok después de romper Internet, destrozar múltiples carreras y arruinar dos matrimonios”.
Desde la producción de Coldplay también se comunicaron con el diario The Sun para confirmar que desde su sector tampoco sabían que la pareja se encontraba entre el público y que los paneos realizados por los camarógrafos fueron casuales como en cada uno de sus shows. “En una gira de conciertos como esta, el camarógrafo en esta parte particular del espectáculo simplemente escanea a la multitud y selecciona a personas al azar”, explicaron.
“Hay un editor de video detrás del escenario o al frente del escenario que seleccionaría a través de un conmutador qué cámara usar en cualquier momento durante el concierto. Esta situación habría sido totalmente aleatoria”, ratificaron incrédulos, ante el revuelo generado a nivel internacional.
“Tal vez intentaron hacer los cálculos y pensaron que las probabilidades de que los vieran en la pantalla grande eran muy bajas, de dos entre 50 mil personas. Conociendo a Chris (Martin), estoy seguro de que no le entusiasma que le presten tanta atención por familias que se ven perjudicadas”, cerraron los productores del show. Hasta el momento, ni Andy Byron ni Kristin Cabot realizaron declaraciones públicas al respecto y se desconoce también la opinión de sus respectivas parejas.