Un segundo peritaje de la Gendarmería sobre el celular de Gerardo Milman no halló evidencias digitales de que el diputado del PRO haya sido uno de los autores intelectuales del intento de asesinado de Cristina Kirchner, como hace tres años sostiene el kirchnerismo.
Así se cayó otra operación K para tratar de involucrar a Milman en una supuesta operación macrista que estaría detrás de la banda de “Los Copitos” cuyos integrantes Fernando Sabag y Brenda Uliarte están en juicio oral.
El segundo peritaje de la Gendarmería analizó palabra por palabra 140 horas de chats de Milman entre el 01/07/2022 y el 10/05/2023. El intento de atentado fue esa primera fecha. El trabajo comprendió 600 mil chats, mensajes de Telegram, mails, y datos en X, entre otras redes.
En su parte resolutiva, el peritaje dice que “no se halló registros de conversaciones, ni material digital alguno que contenga menciones a las ex expresiones que según el testigo Jorge Abello habría proferido Gerardo Milman”.
Según Abello, unos días antes del intento de asesinato, Milman le había dicho a sus secretarías el bar Casablanca: “cuando la maten yo estoy camino a la Costa” o que guarden relación con el intenta de asesinato a la entonces vicepresidenta de la Nación. En base a esos dichos, Cristina hace 3 años que acusa a Milman.
Los peritos efectuaron el filtrado de la información solicitada por la jueza federal María Eugenia Capuchetti usando la herramienta forense “Cellebrite PathFinder”, versión 10.5. Milman había entregado su contraseña y evitó que la magistrada mandara su celular para que lo abra el Homeland Security de Estados Unidos. Fue el segundo peritaje.
El primero que se había hecho con la técnica de la “nube de palabras” fue objetado y a pedido de la querella se hizo este nuevo en base a la técnica de palabra por palabra.
Sin embargo, el abogado de Cristina, José Manuel Ubeira reclamó ante la Cámara Federal porteña porque sus peritos no participaron del nuevo peritaje. La jueza le recordó que habían sido notificados del primero y que debían firmar un acuerdo de confidencialidad para el segundo. Esto era para no difundir mensajes vinculados con la vida personal del diputado.
Entonces, Ubeira apeló a la Cámara Federal la decisión de Capuchetti. Si el tribunal confirma el fallo de la jueza, Milman podría pedir su sobreseimiento. De lo contrario, habrá que repetir el segundo peritaje con la presencia de los peritos de la querella.
Antecedentes
A fines de 2022, Milman se presentó espontáneamente ante la jueza y manifestó su convicción de que el “disparate” fue armado por “la AFI y los diputados Rodolfo Tailhade y Leopoldo Moreau” con la venia de Cristina Kirchner.
El kirchnerismo hizo abrir un legajo reservado en base al testimonio de Abello, un empleado del bloque de diputados de Unión por la Patria.
Las personas que se reunieron aquella tarde con Milman en Casablanca fueron la integrantes de su equipo Carolina Gómez Mónaco e Ivana Bohdziewicz, quienes negaron categóricamente que el diputado opositor supiera del atentado cometido por Fernando Sabag Montiel, uno de los miembros de la “banda de los copitos”.
Bohdziewicz sí confirmó que hablaron de un viaje que el diputado haría al día siguiente a la ciudad balnearia de Pinamar para hacer campaña.
Además, el cuñado de Abello, que estuvo en Casablanca ese día, también negó ante la jueza haber escuchado que Milman hablaba del atentado.
La querella dijo que existía un mensaje de WhatsApp que el propio testigo le envió al diputado del Frente de Todos Marcos Cleri minutos después del ataque.
«Marcos, ayer cuando salí de tu oficina fui con mi cuñado a comer a Casablanca. Al lado mío estaba (Gerardo) Milman con dos pibas y graciosamente decía cuando la maten yo estoy camino a la costa y se mataban de risa», dijo el testigo. El chat no está en el celular de Abello.
Milman denunció por falso testimonio a Abello en otra causa y el fiscal Eduardo Taiano avaló el reclamo. Pero el juez Sebastián Casanello espera que Capuchetti sobresea a Milman para decidir si indaga al empleado del bloque de diputados K, contaron a Clarín fuentes judiciales.